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Muere atropellado el cineasta griego Theo Angelopoulos
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25/01/2012
ATENAS, 25 (EUROPA PRESS) El reconocido director de cine griego Theo Angelopoulos murió este martes a los 77 años en un hospital de Atenas, horas después de que una moto le atropellara. Angelopoulos fue arrollado mientras rodaba una película sobre la severa crisis de la deuda que sufre el país.
Ganador de premios tan prestigiosos como la Palma de Oro de Cannes en 1998 por La eternidad y un día y del Gran Premio del Jurado del mismo festival en 1995 por La mirada de Ulises, Angelopoulos había empezado a rodar su nueva película El otro mar a principios de este mes, una cinta que relata el impacto de la crisis en la vida cotidiana en Grecia y que dejará sin terminar.
Angelopoulos estaba cruzando una calle durante el rodaje de la película cuando fue atropellado por la motocicleta. Inmediatamente fue trasladado al hospital. "Estaba en medio de un rodaje cuando la motocicleta le golpeó. Sufrió múltiples lesiones cerebrales y hemorragias internas", dijo un policía que no quiso ser identificado. La moto pertenecía a un policía que estaba fuera de servicio, dijo el del director.
Una carrera plagada de reconocimientos
En su multigalardonada filmografía destacan títulos como La reconstrucción (1970), Días del 36 (1972), premio FIPRESCI en la Berlinale; El viaje de los comediantes (1975), Premio FIPRESCI en el Festival de Cannes; y Los cazadores, Premio Hugo de Oro a la mejor película en el Festival de Cine de Chicago.
También es autor de Alejandro Magno (1980), León de Oro y Premio FIPRESCI en el Festival de Venecia; Viaje a Cytera (1984), Premio al Mejor Guión y Premio FIPRESCI en el Festival de Cannes; Paisaje en la Niebla (1988), León de Plata al Mejor Director en el Festival de Venecia; La mirada de Ulises (1994), premios del Jurado y de la Crítica en Cannes; o La eternidad y un día (1998), Palma de Oro en Cannes.
Sus últimos trabajos fueron Eleni (2004) y El polvo del tiempo (2008), las dos primeras entregas de su trilogía sobre la historia de Grecia que iba a completar con El otro mar.
ATENAS, 25 (EUROPA PRESS) El reconocido director de cine griego Theo Angelopoulos murió este martes a los 77 años en un hospital de Atenas, horas después de que una moto le atropellara. Angelopoulos fue arrollado mientras rodaba una película sobre la severa crisis de la deuda que sufre el país.
Ganador de premios tan prestigiosos como la Palma de Oro de Cannes en 1998 por La eternidad y un día y del Gran Premio del Jurado del mismo festival en 1995 por La mirada de Ulises, Angelopoulos había empezado a rodar su nueva película El otro mar a principios de este mes, una cinta que relata el impacto de la crisis en la vida cotidiana en Grecia y que dejará sin terminar.
Angelopoulos estaba cruzando una calle durante el rodaje de la película cuando fue atropellado por la motocicleta. Inmediatamente fue trasladado al hospital. "Estaba en medio de un rodaje cuando la motocicleta le golpeó. Sufrió múltiples lesiones cerebrales y hemorragias internas", dijo un policía que no quiso ser identificado. La moto pertenecía a un policía que estaba fuera de servicio, dijo el del director.
Una carrera plagada de reconocimientos
En su multigalardonada filmografía destacan títulos como La reconstrucción (1970), Días del 36 (1972), premio FIPRESCI en la Berlinale; El viaje de los comediantes (1975), Premio FIPRESCI en el Festival de Cannes; y Los cazadores, Premio Hugo de Oro a la mejor película en el Festival de Cine de Chicago.
También es autor de Alejandro Magno (1980), León de Oro y Premio FIPRESCI en el Festival de Venecia; Viaje a Cytera (1984), Premio al Mejor Guión y Premio FIPRESCI en el Festival de Cannes; Paisaje en la Niebla (1988), León de Plata al Mejor Director en el Festival de Venecia; La mirada de Ulises (1994), premios del Jurado y de la Crítica en Cannes; o La eternidad y un día (1998), Palma de Oro en Cannes.
Sus últimos trabajos fueron Eleni (2004) y El polvo del tiempo (2008), las dos primeras entregas de su trilogía sobre la historia de Grecia que iba a completar con El otro mar.
