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Owen Wilson, el guardaespaldas
Tres adolescentes contratan sus servicios en "No tan duro de pelar"
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15/05/2008
El intento de suicidio del actor Owen Wilson tuvo lugar casi al mismo tiempo que finalizaba el rodaje de la película taquillera de la semana: No tan duro de pelar. Dirigida por Steven Brill (responsable de De perdidos al río, Mr. Deeds o Little Nicky, el film es una comedia en la que tres adolescentes contratan un guardaespaldas para protegerse de los matones del instituto. El mercenario no es otro que Drillbit Taylor (Wilson), un hombre seguro de sí mismo que pronto se dará cuenta de que no está preparado para enfrentarse a los monstruos de pantalón corto y se dedicará a perder el tiempo seduciendo a las profesoras. Mientras tanto, los pobres chicos amenazados (Wade, Ryan y Jim) tendrán que valerse por sí mismos. La película se deja ver pero, como podréis deducir, tampoco es que sea nada del otro mundo.
Más elaborada es la trama de Sentencia de muerte. Nick Hume (Kevin Bacon) es un hombre normal y corriente, casado y con dos hijos, que una noche es testigo de un crimen. Nick declarará ante el juez seguro de que el asesino irá a la prisión, pero ya sabemos que la justicia no siempre acierta, y el criminal sale en libertad. A partir de entonces, la vida de Nick será un infierno. Su familia estará continuamente amenazada. Film recomendable a cargo de James Wan, director de Saw.
Una buena noticia para los amantes del blues es el estreno de Honeydripper, de John Sayles, con un reparto encabezado por Danny Glover. La historia está ambientada en la rural Alabama de los años '50, en los enormes campos de algodón trabajados por los negros, donde la música se convierte en un factor vital para los habitantes de esta zona de los Estados Unidos.
Tenemos unos cuantos estrenos más esta semana: El cielo dividido, drama mexicano sobre dos jóvenes homosexuales; La crisis carnívora, una comedia negra de animación no apta para niños; La isla de las almas perdidas, producción escandinava que mezcla realidad y fantasía con tres pequeñajos como protagonistas; Sultanes, film de acción dirigido por Alejandro Lozano y rodado en Buenos Aires; Una chica cortada en dos, la historia de una mujer que se enamora de un escritor depravado pero se casa con un millonario; y Una noche para morir, otra película estadounidense donde chicas ligeritas de ropa son asesinadas sin que (casi) nadie sea capaz de impedirlo.
El intento de suicidio del actor Owen Wilson tuvo lugar casi al mismo tiempo que finalizaba el rodaje de la película taquillera de la semana: No tan duro de pelar. Dirigida por Steven Brill (responsable de De perdidos al río, Mr. Deeds o Little Nicky, el film es una comedia en la que tres adolescentes contratan un guardaespaldas para protegerse de los matones del instituto. El mercenario no es otro que Drillbit Taylor (Wilson), un hombre seguro de sí mismo que pronto se dará cuenta de que no está preparado para enfrentarse a los monstruos de pantalón corto y se dedicará a perder el tiempo seduciendo a las profesoras. Mientras tanto, los pobres chicos amenazados (Wade, Ryan y Jim) tendrán que valerse por sí mismos. La película se deja ver pero, como podréis deducir, tampoco es que sea nada del otro mundo.
Más elaborada es la trama de Sentencia de muerte. Nick Hume (Kevin Bacon) es un hombre normal y corriente, casado y con dos hijos, que una noche es testigo de un crimen. Nick declarará ante el juez seguro de que el asesino irá a la prisión, pero ya sabemos que la justicia no siempre acierta, y el criminal sale en libertad. A partir de entonces, la vida de Nick será un infierno. Su familia estará continuamente amenazada. Film recomendable a cargo de James Wan, director de Saw.
Una buena noticia para los amantes del blues es el estreno de Honeydripper, de John Sayles, con un reparto encabezado por Danny Glover. La historia está ambientada en la rural Alabama de los años '50, en los enormes campos de algodón trabajados por los negros, donde la música se convierte en un factor vital para los habitantes de esta zona de los Estados Unidos.
Tenemos unos cuantos estrenos más esta semana: El cielo dividido, drama mexicano sobre dos jóvenes homosexuales; La crisis carnívora, una comedia negra de animación no apta para niños; La isla de las almas perdidas, producción escandinava que mezcla realidad y fantasía con tres pequeñajos como protagonistas; Sultanes, film de acción dirigido por Alejandro Lozano y rodado en Buenos Aires; Una chica cortada en dos, la historia de una mujer que se enamora de un escritor depravado pero se casa con un millonario; y Una noche para morir, otra película estadounidense donde chicas ligeritas de ropa son asesinadas sin que (casi) nadie sea capaz de impedirlo.