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Recibe la Medalla de Oro del cine español
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10/09/2008
Maribel Verdú se ha convertido en la quinta actriz que recibe la Medalla de Oro del cine español, después de Sara Montiel, Concha Velasco, Ana Belén y Geraldine Chaplin. Un galardón que sirve para premiar su aportación global cine de nuestro país y que Verdú estaba deseando recibir, a tenor de sus palabras: le hacía "tanta ilusión" que sintió "miedo y vértigo" cuando se lo concedieron.
Aunque todavía tiene 38 años, Verdú se ha convertido desde hace tiempo en una de las caras conocidas del cine español. No en vano lleva actuando desde principios de los noventa y ha participado en más de 60 películas. Su carrera, además, sigue en ascenso; acaba de terminar el rodaje de Tetro, a las órdenes del mítico Francis Ford Coppola.
Lo cierto es que el año 2008 ha sido inolvidable para la madrileña, que en enero recibió el Goya a la mejor actriz por su papel en Siete mesas de billar francés. "Espero que no me cojan manía", ha dicho una Verdú que declara sentirse algo "culpable" por tantos premios como está recibiendo. Bien merecidos, sin duda. Eso sí, reconoce que el cine es algo "subjetivo" y que, por tanto, los premios también lo son, aunque éste, quizá, "lo merecía un poquito".
Maribel Verdú se ha convertido en la quinta actriz que recibe la Medalla de Oro del cine español, después de Sara Montiel, Concha Velasco, Ana Belén y Geraldine Chaplin. Un galardón que sirve para premiar su aportación global cine de nuestro país y que Verdú estaba deseando recibir, a tenor de sus palabras: le hacía "tanta ilusión" que sintió "miedo y vértigo" cuando se lo concedieron.
Aunque todavía tiene 38 años, Verdú se ha convertido desde hace tiempo en una de las caras conocidas del cine español. No en vano lleva actuando desde principios de los noventa y ha participado en más de 60 películas. Su carrera, además, sigue en ascenso; acaba de terminar el rodaje de Tetro, a las órdenes del mítico Francis Ford Coppola.
Lo cierto es que el año 2008 ha sido inolvidable para la madrileña, que en enero recibió el Goya a la mejor actriz por su papel en Siete mesas de billar francés. "Espero que no me cojan manía", ha dicho una Verdú que declara sentirse algo "culpable" por tantos premios como está recibiendo. Bien merecidos, sin duda. Eso sí, reconoce que el cine es algo "subjetivo" y que, por tanto, los premios también lo son, aunque éste, quizá, "lo merecía un poquito".
