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Ricciarelli visita España para presentar 'La conspiración del silencio'

La cinta está ambientada en la ciudad de Frankfurt de 1958

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21/01/2015

El director de la película 'La conspiración del silencio', Giulio Ricciarelli, ha asegurado que Alemania "sigue marcada" por la época nazi, tal y como ha señalado con motivo de su visita a Madrid para presentar esta cinta, que se estrena en España este viernes.

Se trata del primer largometraje que dirige Ricciarelli, intérprete de cuatro películas y responsable de cuatro cortometrajes, quien buscó una "historia potente" para su estreno y encontró en este relato un "tesoro", puesto que "nadie ha hablado mucho --y menos en el cine-- sobre aquella época", en la que se observa que nadie sabía nada sobre Auschwitz, según ha indicado durante una entrevista concedida a 'Europa Press'.

Este thriller está basado en la investigación que culminó en los juicios de Auschwitz en los que se condenó a algunos de los miembros de las SS que sirvieron en el mayor campo de exterminio nazi y su protagonista es el joven fiscal Johann Radmann, a quien da vida Alexander Fehling ('Malditos Bastardos').

La cinta está ambientada en Frankfurt, en el año 1958, cuando este joven, quien trata de abrirse camino en la fiscalía, se encuentra ante una trama muy oscura: algunas de las más altas esferas del gobierno están involucradas en una conspiración por ocultar crímenes cometidos por los nazis durante la Segunda Guerra Mundial. El fiscal se vuelca en este caso, a pesar de que todo el mundo a su alrededor parece estar involucrado.

El director considera que cualquier persona es resultado de "sus padres y abuelos", un pasado que no se puede negar y que, en el caso de Alemania, sigue latente. "Sigue estando marcada por aquella época, no conscientemente, pero en el subconsciente creo que es una fuerza dominante en nuestra cultura", ha dicho. Prueba de ello es el hecho de que tras la presentación de este filme en el país germano, varias personas trasladaron a Ricciarelli historias personales "increíbles", en las que la cercanía con criminales nazis era muy estrecha e incluso en ocasiones, los propios familiares han descubierto nuevas relaciones con aquellos horribles sucesos.

"Hay baúles que no se han abierto para no descubrir lo que sus dueños habían hecho durante la guerra", cuenta. Cuando el director de 'La conspiración del silencio' tenía ocho años, otro niño le mostró unas fotografías sobre Auschwitz. "Yo no entendía nada, mi mundo se vino abajo. Ahora que soy adulto me he dado cuenta de que en el fondo hay algo incomprensible que nunca podremos entender", ha indicado.

Su reto en esta ocasión ha sido trasladar ese sentimiento a la película y reconocer el trabajo que se ha hecho con estos procesos judiciales, que se celebraron entre diciembre de 1963 y agosto de 1965 y tuvieron como resultado un total de 22 procesados, 17 de ellos condenados.

Por su parte, el actor Alexander Fehling ha destacado que las relaciones humanas son "muy importantes" en esta historia, puesto que no se trata de un documental. Además, ha subrayado que no se retoman diálogos habituales ni formas de actuar convencionales, sino que se intenta sorprender, tal y como se comprueba en afirmaciones como: "Todos los alemanes deberían vestir de negro". "En Alemania, la gente está un poco cansada del tema, pero a muchos esta película ha parecido algo inesperado y distinto", ha dicho.

Pegida: "No hay peligro"

En cuanto a PEGIDA, el movimiento político alemán que comenzó a manifestarse en Dresde contra los musulmanes en octubre de 2014 y cuyas siglas responden a 'Patriotas Europeos contra la Islamización de Occidente', Ricciarelli ha afirmado que no hay nada que temer, puesto que no cree que vaya a repetirse el mayor horror del siglo XX. "Alemania tiene una democracia muy estable y no existe ese peligro real de resurgimiento del nacionalsocialismo. Tampoco creo que la historia se repita", ha dicho, aunque precisa que la sociedad ha de andar con mucho cuidado para defender los valores de libertad justicia e igualdad".

No obstante, ha señalado que "un alemán ha de asumir esa responsabilidad" y concluye que el hecho de que un periodista le haga esa pregunta en España significa que "la historia sigue estando ahí, forma parte de la cultura".

Contenido: Europa Press

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