10 películas esenciales para debatir sobre el aborto
Recordamos cómo ha abordado el cine esta clásica polémica
Por Icíar Palacios
Al igual que la religión, la política, la economía o el deporte, el aborto es uno de los grandes temas que dividen la opinión de la sociedad. Sobre él se ha legislado, se ha escrito, se ha debatido y, cómo no, se han rodado películas.
Con la ley española sobre la interrupción del embarazo tan en el candelero, nosotros, que somos muy de hacer listas, nos hemos animado a realizar nuestra selección de films que tratan, de un modo u otro, sobre el aborto. ¿Te animas a comprobar cuántos has visto ya y a recomedarnos otros que no hayamos incluido?
4 meses, 3 semanas y 2 días (Cristian Mungiu, 2007)
La que se alzara con la Palma de Oro y el Premio FIPRESCI de la Crítica en el Festival de Cannes de 2007 es una de las más impresionantes crónicas audiovisuales sobre el aborto. En ella, Cristian Mungiu nos presenta la historia de una joven rumana que decide no traer al mundo el bebé que espera. Al ser ilegal en su país, se ve obligada a hacerlo en un hotel de mala muerte, donde el 'doctor' Mr. Bebe le espera. Al verla, el espectador se plantea, casi obligatoriamente, una pregunta: ¿Es la prohibición la solución al problema?
El crimen del padre Amaro (Carlos Carrera, 2002)
Amaro (un soberbio Gael García Bernal) es un joven sacerdote que se traslada a una nueva parroquia donde conoce a Amelia, una niña de 16 años de la que termina enamorándose. La historia no sería nada del otro mundo si esta chica no se quedara embarazada del cura. Cuando esta decide abortar en una clínica ilegal, todo se complica trágicamente...
Este drama de factura mexicana producido con menos de dos millones de dólares reventó la taquilla nacional, convirtiéndose en la cinta más exitosa de la historia en los cines del país del picante. Fuera de sus fronteras, la crítica internacional se rindió a los pies de 'El crimen del padre Amaro', llegando a ser nominada al Oscar en la categoría de mejor película de habla no inglesa.
Juno (Jason Reitman, 2008)
En 2008 una comedia indie un tanto peculiar sacudió la taquilla internacional. Hablamos de 'Juno', una cinta que bajo una estética un tanto naive hizo lo que parecía imposible: abordar este tema tan peliagudo con una sonrisa y contentar tanto a los proabortistas como a quienes estaban en contra. Con una taquilla que superó los cien millones, 'Juno' fue producto de tres grandes jóvenes promesas de la industria: su realizador, Jason Reitman; la magnífica guionista Diablo Cody y Ellen Page, que pasó a convertirse en la nueva musa del cine independiente anglosajón. Reseñable también su blanda sonora, que no viene al caso, pero... todo hay que decirlo.
El secreto de Vera Drake (Mike Leigh, 2004)
Con el premio León de Oro en 2004 como tarjeta de presentación, 'El secreto de Vera Drake' narra la historia real de una mujer que, convencida de que hacía lo correcto, practicó durante años abortos ilegales. No cobraba por ello. No reprendía a quien requería de sus servicios. Y era feliz haciéndolo, hasta que... Hasta que dejó de serlo. Inmensa Imelda Staunton. Sin ella, muy posiblemente, esta película no sería la joya que es.
Las normas de la casa de la sidra (Lasse Hallström, 1999)
Con Charlize Teron, Tobey Maguire y Michael Caine encabezando el reparto, esta cinta de Lasse Hallström presenta al espectador a Homer Wells, un chico criado en un orfanato. Cuando el director del centro le propone ser su sucesor, Wells decide que es hora de emprender una vida fuera de sus paredes; una vida en la que se le presentarán profundos dilemas morales. Orfandad, aborto, incesto, guerra y amor aderezados por una fotografía y una puesta en escena para recordar. Imprescindible.
Dirty Dancing (Emile Ardolino, 1987)
Además de ser una de las cintas románticas más emblemáticas del cine de los 80, esta película guionizada por Eleanor Bergstein y dirigida por Emile Ardolino en 1987 introdujo temas un tanto puntillosos como el de la autoridad paterna o el aborto. Si la cara que se le quedó a la ingenua Baby cuando vio a Johnny bailar por primera vez junto a Penny fue un poema, no queremos imaginar lo que pensó la juventud de la época cuando 'Dirty Dancing' le escupió a la cara la cruel realidad (aunque con un tufo moralizante): no tomar precauciones con el sexo trae consecuencias y estas pueden ser muy serias si no se gestionan bien.
El grupo (Sidney Lumet, 1966)
La vida de ocho mujeres en el año 1933 da para mucho. Si no que se lo pregunten a las protagonistas de 'El grupo', una cinta dirigida por Sidney Lumet en 1966. En ella vimos cómo estas amigas comenzaban a vivir sus vidas tras graduarse y cómo el modo de buscar la felicidad de cada una de ellas se distanciaba, poco a poco. En un momento del siglo en el que la tradición comenzaba a dejar hueco a nuevas ideas, este cineasta americano supo cómo incluir el debate en torno al aborto sin herir sensibilidades.
October Baby (Andrew y Jon Erwin, 2011)
La dramática road movie 'October Baby' trajo presentó la interrupción del embarazo, sin duda, desde un punto de vista novedoso: el de una mujer que sobrevivió a un aborto fallido y que fue dada en adopción. Esta historia de superación personal y reconciliación basada en hechos reales, eso sí, falló en sus formas, ya que resulta un tanto pegajosa, evidente desde el comienzo y claramente propagandista.
Ordet (Carl Theodor Dreyer, 1955)
En 'Ordet' el guionista y realizador danés Carl Theodor Dreyer aborda de manera profunda y honda la realidad de la existencia humana, a través de una serie de personajes que desean creer en Dios y vivir según sus leyes, aunque el mundo les hace dudar casi a cada paso de si están en lo correcto. Bajo una apariencia simple, 'Ordet' nos sumerge en un universo de planos-secuencia donde la sobriedad llevada al milímetro es la norma. Que no os asuste todo esta parafernalia (o su ausencia): 'Ordet' es una de esas películas que te cambian, quizás no la vida, pero sí la semana.
Un asunto de mujeres (Claude Chabrol, 1988)
Cuando los nazis invadieron Francia durante la Segunda Guerra Mundial, la vida para los galos se hizo muy complicada. Bajo estas circunstancias, Marie Latour decide ayudar a su vecina a poner fin a su embarazo, ya que espera un niño que no desea. Poco a poco, corre la voz por el barrio de que Latour sabe cómo provocar abortos; por lo que numerosas mujeres violadas y esposas de hombres que luchan en la contienda requieren de sus servicios.